Un extracto. Al completo en:
» … Y en esa inexorabilidad, nosotros: materia, carne que no es más que carne; nosotros, que somos devorados por esa gota que cae en nuestra existencia sin cesar. El bodegón, ceremonialmente dispuesto, en un mesa central, cae en manos de tres mujeres y un hombre sensualmente voraces: entre mordiscos, risas, abrazos, toques de Eros y retoques de Baco, se temen, se entrelazan, se entregan, huyen, devoran y se devoran entre frutas y verduras. Todo es fugaz, sin embargo algo huele a podrido en ese su reino donde parecen no poder salir y están condenados a entretenerse y a alimentarse.Warning: para Platón el amor es el alimento del alma. Y esta puesta en escena es ingerir con o sin ganas… «.
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