Recapitulación de mis «impresiones». Insisto: las escribo más por aprendizaje y disfrute que por opinión pura y dura, de ahí que acudo a través de masteatro.com a ver a aquellas que me atraen. Porque, ¿quién puede tener la potestad de dejar por escrito si nosotros/as, farándula cambiante, siempre estamos esperando en una cola para entrar? Nadie se libra de ocupar un puesto ahí. Pues cuando has pasado la fase X, ya estás lampando por la fase Y. La Z, camarada, sólo se encuentra en la tumba: el verdadero reconocimiento, como decía Benavente. Enhorabuena a todos los repartos por su buen hacer y a los teatros por su generosidad, aunque hay uno en particular por la calle Príncipe que contento me tiene, y voy porque el clásico me chifla… Al comienzo de la próxima temporada estaré con los preparativos de la presentación de mi cuarto libro de teatro «La maldición de Mírtilo» ( o cómo y por qué Edipo se llega a arrancar los ojos. Una precuela, una indagación en la mitología) y «Sabina» (o cómo y por qué muere Antinoo a manos de la emperatriz, esposa injusta de Adriano. Una sospecha en la «Historia Augusta»). Será a finales de octubre en los madriles y el 8 de noviembre en el Ateneo de Sevilla (qué menos si el emperador nació a pocos metros de esta sede singular donde se creó la Generación del 27, por ejemplo).